Los senadores Jose Luis García Zalvidea y Silvano Aureoles Conejo, integrantes del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la LX Legislatura del honorable Senado de la República, en ejercicio de la facultad que les confieren los artículos 67, numeral 1, inciso b, de la Ley Orgánica del Congreso General, así como 58 y 59 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, someten a consideración de esta Comisión Permanente, la siguiente proposición con punto de acuerdo con relación a las insuficiencias e irregularidades detectadas en la implantación del programa ProÁrbol, al tenor de las presentes
Consideraciones
Primera.
Es reconocido por las propias autoridades del medio ambiente, que México ocupa el cuarto lugar en los países con mayor deforestación en el mundo, y es que en nuestro país, con un promedio de 600 mil hectáreas destruidas cada año, el 14 por ciento de las emisiones de gases invernadero son producto de la deforestación derivada los incendios, tala clandestina y conversión de zonas forestales en campos para la agricultura y la ganadería.
Segunda. El gobierno federal ha instrumentado desde hace dos años, ProÁrbol, principal programa de apoyo al sector forestal, el cual tiene como objetivos:
1. Disminuir los índices de pobreza y marginación en áreas forestales, mediante la inducción a un manejo y uso adecuado de sus recursos naturales;
2. Generar desarrollo y expansión económica a partir de la valoración, conservación y aprovechamiento sustentable de los recursos de los bosques, selvas y la vegetación de las zonas áridas;
3. Impulsar la planeación y organización forestal, elevar la producción y productividad de los recursos forestales y su conservación y restauración, así como elevar el nivel de competitividad del sector para contribuir a mejorar la calidad de vida de los mexicanos.
Sin embargo, estas metas no han sido cumplidas, ya que una de las características de este programa es que la mayor parte de los subsidios son destinados a la plantación de árboles y no a su mantenimiento, por lo que esto ha generado una falta de eficacia en la tasa de reforestación.
A este programa se le han detectado anomalías sobre el destino de los recursos en el ejercicio del 2008, ya que no ha podido involucrar a la población con programas productivos y sustentables.
Para el 2008 a ProÁrbol se le autorizo ejercer recursos por 4 mil 799 millones de pesos, y para el 2009 se autorizaron 4 mil 930 millones de pesos. El 38.5 por ciento del presupuesto de ProÁrbol está destinado a programas de conservación y restauración de ecosistemas forestales y en los proyectos en los que esté involucrada la población sólo se destina el 2 por ciento del presupuesto.
De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal, en 2007 se plantaron 253 millones de árboles con una tasa de supervivencia de 58 por ciento; no obstante, diversas organizaciones no gubernamentales han estimado con estudios de campo que 74 por ciento de las plantas sembradas no sobrevivieron y que 26 por ciento de los árboles que sí crecieron se encuentra en malas condiciones debido a que no son especies nativas de la región, y a que alrededor de 15 millones de árboles l, son especies clasificadas como exóticas, que están prohibidas por la Ley General de Vida Silvestre y la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable.
Tercera. Organizaciones ambientalistas han puesto en tela de juicio el manejo de los 2 mil 700 millones de pesos que el gobierno invirtió para este programa, mientras que asociaciones de silvicultores ya han denunciado ante la Cámara de Diputados favoritismo e irregularidades, por la falta de transparencia en la asignación de los recursos.
Esta falta de transparencia en la operación de este programa ya ha sido objeto de debate hacia el interior de la Cámara de Senadores, ya que el 11 de septiembre de año próximo pasado, el senador Silvano Aureoles Conejo, integrante del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática, presentó una propuesta con punto de acuerdo, al Pleno del Senado de la República, por el que se exhortaba a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales a ajustarse a lo dispuesto en el decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación en materia de transparencia en relación con el programa ProÁrbol.
Derivado de esta propuesta el 30 de septiembre de 2008, fue aprobado el dictamen de la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca, por el cual el Senado de la República, exhortó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, y a la Comisión Nacional Forestal (Conafor) a que, en el ámbito de sus respectivas competencias, publicaran de inmediato la convocatoria del Programa de Asistencia Técnica para acceder a los Programas Forestales del programa ProÁrbol; y que a la vez, informaran, en su caso, del avance del ejercicio en los recursos del Programa de Asistencia Técnica para acceder a los programas forestales de ProÁrbol, la fecha de publicación de las reglas de operación y de la convocatoria correspondiente, así como las organizaciones locales, regionales, estatales y nacionales que han sido beneficiadas con este programa, bajo qué procedimiento se les asignaron los apoyos y los montos de los mismos.
Aunado a lo anterior, en fechas recientes el mismo ejecutivo federal a través de la Secretaría de la Función Pública, ha iniciado una investigación para esclarecer el destino de 2 mil 700 millones de pesos que se invirtieron en el programa ProÁrbol, ya que el 90 por ciento de la inversión, no dio frutos.
La Secretaría de la Función Pública ha iniciado una investigación, luego de que en el estado de Chiapas se ha denunciado por los medios de comunicación nacional, que existen viveros apoyados por este programa, que carecen de planta alguna y de que zonas en las que deberían de existir árboles se encuentran en un estado desértico.
Es por ello que resulta es necesario solicitar que el gobierno federal, a través de la secretaria del ramo, comparezca a efecto de clarificar los resultados del programa forestal ProÁrbol, el cual ha sido enarbolado como bandera de uno de los mayores logros del actual gobierno hacia el exterior, en especial en la Organización de la Naciones Unidas a la cual, en próximas fechas enviaran los últimos resultados de dicho programa.
Dicho informe lo sustentará México el 10 de febrero ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, como parte del Examen Periódico Universal (EPU) y en él considera aspectos como derechos económicos, sociales, culturales y ambientales.
Se señala en ProÁrbol un sesgo en el marco de calificación de los diferentes programas de subsidios a favor de una figura organizativa creada e impulsada por la propia Conafor y que son las asociaciones regionales agrupadas en una central denominada Confederación de Organizaciones de Silvicultores, que tiene sus oficinas dentro de las propias instalaciones de la Comisión Nacional Forestal.
El artículo 23 del decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2008, en su fracción VI, establece que "en el caso de programas que no cuenten con padrón de beneficiarios, deberán mejorar, manejarse invariablemente mediante convocatoria abierta, y en ningún caso se podrán etiquetar o predeterminar de manera específica recursos a determinadas personas físicas o morales u otorgarles preferencia o ventajas sobre el resto de la población objetiva.
"De igual manera queda prohibida la utilización de los programas de apoyo para promover o inducir la afiliación de la población objetivo o determinadas asociaciones o personas morales".
Esto es contrario a lo que está sucediendo en ProÁrbol.
Por lo anterior, ponemos a consideración de esta Comisión Permanente, el siguiente
Punto de Acuerdo
Primero.
Segundo. La Comisión Permanente del Congreso de la Unión, exhorta al secretario de Medio Ambiente y Recursos naturales, ciudadano Juan Rafael Elvira Quezada, y al director general de la Comisión Nacional Forestal, ciudadano José Cibrián Tovar, a efecto de que se reorienten las políticas ambientales y de reforestación, a fin de optimizar los recursos que se ejercen, se revisen las reglas de operación de los programas ambientales, en particular ProÁrbol, a fin de subsanar los problemas técnicos que redundan en desperdicio de recursos.
Tercero. La Comisión Permanente del Congreso de la Unión extiende un respetuoso exhorto a la Secretaría de la Función Pública a fin de agilizar las auditorías al Programa Nacional Forestal y remitir con la mayor brevedad un informe detallado respecto de sus resultados a las Cámaras de Diputados y de Senadores.
Suscriben
Sen.José Luis García Zalvidea
Sen. Silvano Aureoles Conejo
No hay comentarios:
Publicar un comentario